"Señora su hijo no es un santo". Una frase que aún tengo guardada en la mente. Su frase propiamente. Pero no era todo "Señora, tiene un hijo inteligente, pero su letra..." Así fue Olga Benavides, una de mis primeras maestras de colegio. Llegó a congeniar tanto con mi aún no vieja.
Su partida fue inesperada. Producto de un trágico accidente. Una gran consejera de los chicos que pasaron a secundaria. Fue la primera en explicarme sobre la función de mi pene y de la sexualidad. La maestra como fue y será.
Chaclacayo
21/11/08
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