martes, 20 de marzo de 2012

Gods of War

Qué de maravilloso puede tener este juego de castillos y dragones y soldados pequeños, rezando antes de enfrentarse al que bien podría acabar con su vida.

Este juego tiene seguidoras y jugadoras tan lindas como Andressa y tan hábiles como otras que han sabido desintoxicar su cerebro cortesía del cabello corto y de los departamentos con “blocos” indescifrables. Pero volviendo a la magia y a la astucia de juegos, como el de Andressa, conviene preguntarse. ¿No estamos ante un buen juego de video?

Páginas Web

Hubieron tiempos en que las Páginas WEB se venían comiendo al mundo y a su nuevo conocimiento. Hubieron tiempos en que yo deseoso de ingerirme buena parte de ese mundo, adquiría mis primitivos conocimientos del HTML y el ASP. Así como quien quiere la cosa.

Pero la cosa terminó siendo cada vez más inmanejable, que tratamos de hacer un paréntesis pequeño y nos metimos de lleno con los sistemas de producción y el mundo de JAVA, aunque claro también programando en HTML nuestras pequeñas cositas que después madurarían con ayuda de las páginas amigas y los clientes. A los que nunca se impregnaron de nuestra cultura de trabajo.

“…com responsabilidade”

Tiempos del Carnaval, tiempos del amor y de las travesuras y qué mejor que asegurar un buen slogan con dicho término. Porque el Carnaval ya comenzó y hay que darle paso a nuestras pasiones.

“…com responsabilidade.”

Poshette

Tenías que llevar puesto esa huevada que contenía cosas tan valiosas, como la llave de tu casa y tus preservativos. Tenías que llevar puesto esa huevada, porque estabas en mi propio terreno empresarial y alguien dijo que ya era muy tarde.

Lo cierto es que para ser un fracaso social, es preferible la sencillez; como la del que también busca la solución. Pero la solución estaba en sencillamente no llevarlo, porque ya había pasado de moda. Vuelta al Fracaso Social.

La Suavidad del Tema

Una mujer se esconde tras sus sábanas, una chica se esconde tras sus peluches gigantes, una niña se esconde tras sus peluches pequeños. Y yo, yo jamás aprendí a esconderme. Porque llevo una punta amarga a la altura de mis tobillos, la que no me permite dormir y mucho menos esconderme.

De pronto yo la llamo, de pronto me doy cuenta que siento algo por ella, algo que no me deja vivir tranquilo. Una animalidad que me bordea al sentido del cansancio, que me hace titubear malignamente, y nada parece cambiar; a pesar de que el tema es tan manejable como un carrito de Lego. Pero eso ni ella, ni su destino aún no parecen entender.

Ibañez

No estoy hablando del ilustre arquero argentino y crema casino del club universitario. Hablo de mi maestro de escuela de fútbol el profesor bajito del que perdí su nombre de tanto tenerlo en la punta de la lengua, de mi profesor y su gran parecido con el arquero argentino y crema casino del club universitario.

Pero este profesor no enseñó a conducir el balón,, a dar pases precisos y también nos recomendó que cuando no picara ahí; sí “Hay que lavarse chicos, eso es importante” Porque esa era la parte favorita de mi maestro, la que bien recuerdo.

Imbéciles

Según recientes estudios valorados por la ONU y su organismo para el control de enfermedades y epidemias, se registraron en nuestro planeta los siguientes resultados de censos y empadronamientosen algunos países desarrollados:

En Europa, el 65 % de su fauna animal, corresponde a los seres humanos.
De este 65%, la mitad mostró disconformidad de su patología alegando que requería un trato de loco, por una cuestión de orden y solidaridad.

Pero ahí debió venir el otro 32% que prefirió creer que se trataba del mismo chico de la última vez que debería cambiar de vida ahora justamente que era un cadáver.

Ahora que Danzas Entre Libros

Lu o Nanu (o Lucía a duras penas) nunca volverá a ser la misma caricatura orgásmica de mi corazón (si es que se tiene uno lo suficientemente maduro a los dieciocho) Nanu o Lu, como cualquier otro inteligente espécimen de mujer que sabe llegar a mí; captó muy bien mi corazón.

Pero así como los libros que recorren con ayuda y con dados, así como un orgasmo amor y liberal; así ella también paso entre las bocanadas del placer de un día sin calendario. Y la perdí, y nos perdimos como dos niños sin cultura. Como dos criaturas voladoras son nido.

Ian Curtis

Quizás si habláramos de diminutivos, bien pudiésemos decir que nos llamamos igual. Pero entre ese recordado vocalista y obrero y yo, hay algo más que unas cuantas letras. Hay todo un pronóstico reservado. Por cuanto yo y él tenemos más que un gesto en común.

Y parte de nuestra cabellera, de nuestra mirada, de nuestras muecas en busca de supervivencia. Hay música también, y sonidos y nuevamente miradas; el Marketing, los canales de video: Ian Curtis y a su costado yo. Porque bien Dicen que Soy.

Un Amigo, Casi un Ángel


En un mundo voraz y sobredimensionado por la publicidad, el calor y el trasero de sus mujeres, en un mundo donde te encuentras solo y es así de solo como te enfrentas a su clima y a su apacibilidad funesta; recibes una llamada.

- Haz lo posible tío, tienes que estar en Río. Aunque sea almuerzas pan y agua. Pero tienes que ir.

No fue la decisión más fácil del mundo a sabiendas, que esperaba una gestión, una universidad; quizás dos. Pero la oportunidad y el deseo de seguir descubriendo ese mundo, era preciso. Y fue así que se tomó la decisión de acuerdo a lo previsto por ese ángel.